miércoles, 22 de abril de 2015


"Me multipliqué, para sentirme,
Para sentirme, necesité sentirlo todo,
Me desbordé, no hice si no extralimitarme,
Me desnudé, y me entregué
Y en cada rincón de mi alma hay un altar a un dios diferente."

- Fernando Pessoa, Pasaje del Tiempo (Álvaro de Campos, A Passagem das Horas)

4 comentarios:

  1. Mi poeta favorito, aunque no haya existido jamás. (Y si de verdad lo hizo con más motivo en ese caso, porque aquí estoy yo entonces, existiendo también, queriendo salvar a los osos polares y con la poesía y los pies que como tú sabes hacen cosas extrañas.)

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  2. Existió, porque también es uno de mis poetas favoritos, y porque Pessoa y nosotras, no queremos aceptar que, como nos han dicho, toda figura creada tiene bordes que limitarían todo sueño y vida.

    El libro del desasosiego, fue lo primero que leí de él en mi adolescencia. Me ayudó mucho. Mi existencialismo exacerbado encontró un reflejo en la misma medida, de conciencia, poesía y sentimiento. Su sorprendente y maravillosa escritura me hizo encontrar el consuelo último del dolor y de cada pasión extrema. Metafísico, existencialista. Lleno de lluvia de los pies a la cabeza. Místico sin fe, es cierto, un nihilista. Un genio enfermo de amor y de poesía. Y en su tristeza y dolor todo lo dijo sin censuras. De ahí su brutal belleza.

    Nosotras existimos, queriendo salvar a los osos polares y con la poesía y los pies que hacen cosas extrañas, los pies y el tiempo y demasiadas tormentas de primavera...el amor y las sincronizaciones...

    Te quiero Elise. Te quiero de todos modos - aunque no existiera, incluso si no hay ningún yo ni ningún amor o incluso cualquier tipo de vida. Pero más allá quizás sí y sí la hay.

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  3. Yo también te quiero aunque no te haya visto nunca ni sepa mucho de ti y lo hago por dos motivos: porque me quiero y porque me quieres.

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  4. Me emocionas mucho, Elise. Extremadamente vulnerable, necesito imaginar que nuestras vidas que todos hemos hilado (tan delicadamente) en los pliegues de nuestras mentes nos ofrezcan las posibilidades de los sueños.

    Estoy enamorada de la lluvia, de la luna, de los miembros de la santidad de la noche, de dejar mi corazón en las manos de todos los latidos de mi corazón. Yo estoy enamorada de saber que algo se ha atesorado, tan amado. Me gusta cómo te conozco a través de tu escritura. Mi alma prendada. El sentimiento que viene como una furia. En el mundo tal cual es. Es un sentimiento de exterioridad mágica.

    Un beso Elise. Buenas noches y dulces sueños.

    P.S : ...el mar, que en Madrid es el cielo. Tengo el cielo en el pecho y las olas adentrándose en mi corazón...

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